La alimentación del bebé en los viajes es uno de los temas que más preocupa a los papás a la hora de ir lejos con su pequeñines.

Y es que, al menos en nuestro Instagram @viajandodo, ésta es una de las consultas que más a menudo nos hacéis.

Cada familia es un mundo y cada bebé también. Por lo que en este post hemos querido englobar todas las formas de alimentación posibles (y no solo la nuestra) para que podáis organizaros bien a la hora de viajar con ellos.

¡Empezamos!

LA LACTANCIA: UN GRAN ALIADO

Desde nuestra experiencia, y como mamá viajera que ha dado el pecho a sus bebé hasta los 16 meses, podemos afirmar que, la lactancia materna nos ha facilitado mucho las cosas en los viajes.

Sobre todo, teniendo en cuenta que, empezamos la aventura con ella a sus dos meses y medio y desde ahí no hemos parado en destinos como New York, Marruecos o Albania entre otros.

Y es que, tener la comida lista y calentita en todo momento resulta de lo más práctico estés donde estés: ya sea un aeropuerto, en un avión, en una estación de tren, en un museo, paseando por cualquier ciudad, en la playa o en el campo. Por no decir, que es una opción de lo más económica tanto en casa como cuando se está de viaje.

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Lo que dice la OMS al respecto

En este sentido, la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida del bebé y dicha recomendación se extiende, de ser posible, hasta los dos años.

Incluso, debemos saber, que la leche materna contiene sustancias que benefician el desarrollo del sistema inmmunólogico del bebé, por lo que viajando con ellos representa una protección suplementaria.

En cualquier caso, si eres una mama lactante y tenéis intencion de viajar con vuestro bebé, enhorabuena, pues todo son ventajas.

¿Sabias que somos los creadores del primer libro de la Guía para viajar con tu bebé? Si te mueres de ganas por que te digan que viajar con tu bebé es posible e incluso beneficioso para su desarrollo, esta es tu guía.

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FORMULAS INFANTILES

Bueno, ¿y qué pasa si mi bebé toma biberón? ¿Lo tengo más complicado para viajar o qué?

Pues… ¡Ni mucho menos! Simplemente, tendréis que organizaros de una manera diferente.

En este caso, podréis llevar la leche en polvo desde casa si es para un periodo corto. Podréis elegir hasta un formato de bote adaptado al viaje y llevar dispensadores que os faciliten su transporte en dosis para prepararlos fuera.

Y, ¿cuántos biberones me llevo? Lo ideal, de hecho, es que llevéis con ustedes un par de ellos con vuestro kit limpiador.

Con el tema del agua, que sea siempre embotellada y para la misma, podéis contar con un termo o un biberón isotérmico para manternerla fría o caliente por varias horas. También, en la gran mayoría de países, os la calentarán en cualquier bar o restaurante. Lo que es algo a tener en cuenta para no cargar con tanto trasto.

Los calentadores, son sobre todo útiles si vuestro bebé hace muchas tomas, si vais a zonas rurales algo desconectadas o para viajes largos en carretera. Hoy en día, los hay de todo tipo y formatos: eléctricos, para conectarlos al coche, los que se cargan con batería portátil y USB…

Para un viaje muy largo, podéis llevarle comida para los primeros días y luego comprar el resto en destino. Un consejo que podemos daros en este sentido, es mirar antes por internet qué tipo de supermercados hay en el lugar al que viajéis, ver si tienen página web y verificar con qué marcas de productos infantiles trabajan.

Al mismo tiempo, y, al igual que con los purés, contar con un alojamiento que tenga microondas, cocina o mini-kitchen os puede facilitar las cosas.

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Dar leche materna en biberon

Si tu bebé toma leche materna pero lo hace en biberón entonces un sacaleches, unas bolsitas térmicas y una neverita pueden ser buenos aliados.

Actualmente, es posible viajar con un sacaleches incluso en los aeropuertos y aviones, por lo que si quieres saber más sobre el tema, te lo contamos todo en este post.

PAPILLAS Y TRITURADOS

A partir de los 6 meses, se les puede ir ya introduciendo purés de frutas y verduras, por lo que, en este sentido, la organización no es muy distinta a la del biberón.

En la mayoría de lugares, podréis pedir que os los calienten (incluso dentro del avión), pero sino, un buen termo puede hacer las veces.

Por un lado, podéis optar por comprarlos ya hechos, ya que incluso en los países más remotos a los que hemos viajado con nuestro bebé, hemos encontrado todo tipo de marcas conocidas, muchas de ellas hasta orgánicas.

Y, por otro, en caso de querer prepararlos caseros durante la estancia, tendréis que contar con un alojamiento que cuente con cocina equipada y algún sistema para triturar alimentos.

SISTEMA BLW Y SIMILARES

Si a partir de los 6-8 meses vuestro bebé ya empieza a comer sólidos, ello también es una ventaja a la hora de viajar.

La nuestra, por ejemplo, aun sin tener dientes, ya comía judías verdes y pequeños trozos de pollo y fruta. Y ello incentivó, considerablemente, sus ganas de probar otras cosas durante los viajes.

En cuanto a la alimentación del bebé en los viajes, si vais a darles de probar nuevos alimentos, tened en cuenta que tengan ingredientes que puedan tolerar conforme su edad: pues no es lo mismo lo que puede comer un bebé de 8 meses que de 16, por ejemplo. A partir del año, generalmente, es cuando pueden empezar a comer ya casi de todo.

Tampoco se aconseja dar de comer nuevos alimentos durante el viaje que no hayan sido introducidos previamente durante la alimentación complementaria a menos que vayáis a realizar un viaje por varios meses. Y si podéis evitar aquellos alimentos que sean susceptibles de provocar alergias o flatulencias mejor.

Verificad también, por motivos de seguridad, que los alimentos estén cortados debidamente para evitar atragantamientos, aunque, seguramente, esto es algo que ya tenéis en cuenta en casa.

En cualquier caso, que coman sólidos desde bien temprano, incentiva su curiosidad gastronómica y se motivan al ver que comen «como los grandes».

VENTAJAS DE LA FRUTA

Hablando de la alimentación del bebé en los viajes, si a algo le hemos sacado bien partido, ha sido a la fruta. A partir del momento que podía comerla sin problema, siempre llevamos con nosotros algún plátano, mandarina, manzana…

De hecho, algo que nos encanta hacer en los viajes, es ir a los mercadillos locales para comprar algo de fruta de la región y dejamos que sea la peque quien la elija. Después, se vuelve loca probando una y otra ¡Y nosotros con ella!

La fruta fresca tiene multitud de vitaminas para vuestro bebé por no decir, propiedades hidratantes ideales en lugares como la playa o en el campo. Así que no dudéis en sacarle provecho.

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MENUS INFANTILES

Cuando nuestro bebé ya come de todo, da gusto llegar a un restaurante y ver «menú infantil». El problema es que, en muchos casos, éstos no van mucho más allá de la pasta con tomate y los nuggets de pollo.

Por lo tanto, algo que empezamos a hacer (y, que, de hecho seguimos haciendo) es pedir varios platos o compartir los nuestros con ella para que vayan probando un poco de todo. Ella contenta al poder picotear de aquí y de allá y nosotros también al ver que come más sano y variado.

A la hora de compartir, lo que hacemos es indicar en los restaurantes que no nos añadan sal en la comida porque vamos a compartir con la peque.

Por otra parte, queríamos señalar que, la comida de los puestos callejeros, a pesar de que hay cosas deliciosas, no suele ser muy recomendada en la etapa bebé ya que no todos cuentan con un mínimo de garantías de higiene. Así que, de preferencia, mejor evitarlos.

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COMO ORGANIZARSE

Alojamientos

Como habéis podido leer arriba, en lo que respecta a la alimentación del bebé en los viajes, os resultará más práctico elegir un tipo de alojamiento u otro.

No existe un modelo de alojamiento perfecto para alojarse con un bebé, sino que esto dependerá de vuestras necesidades y las de éste. Así qué, afinar vuestros criterios de búsqueda en virtud de lo que mejor os convenga.

En este sentido, para los hoteles, apartamentos, campings u otro tipo de establecimientos podéis buscar AQUI. Nosotros siempre hemos ido reservando con uno y otro y nos ha ido muy bien ya que en la mayoría de los casos tienen cancelación gratuita.

Accesorios

Hoy en día, los hay de todo tipo a la hora de viajar con nuestro bebé. A nosotros, al menos, nunca nos faltaba nuestra neverita con agua, su fruta, puré o verduras, cubiertos y baberos. Y podréis ir adaptando su contenido a cada etapa.

Los primeros meses en normal cargar con algunos accesorios de más para su alimentación, pero, a medida que crecen, ya veréis que se puede ir prescindiendo de muchos de ellos pues cada vez comen de manera más similar a nosotros. En nuestra tienda online, podréis encontrar algunos accesorios indispensables que os pueden facilitar la vida viajando con vuestro bebé.

Aplica la lógica

Como véis, sea cual sea la forma en la que se alimenta vuestro bebé no hay límites para viajar con ellos. Y eso motiva bastante.

Analiza el tipo de viaje, las características del destino, el tipo de actividades, donde os alojaréis, si vais a realizar desplazamientos largos en coche…. Todos esos elementos os permitirán organizar mejor la alimentación del bebé en los viajes y todo lo demás.

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Esperamos que nuestro post sobre la alimentación del bebé en los viajes os sirva de mucha ayuda y para cualquier consulta, podéis dejadnos un mensaje aquí abajo. Será un placer responderos.